«Hagamos la logística más visible y atractiva». CADENA DE SUMINISTRO
Artículo de opinión en el Monográfico sobre los “20 Años del transporte y la logística en España” de Cadena de Suministro
Si me preguntan qué cosas han cambiado en el mundo del transporte y la logística en las más de dos décadas que llevo trabajando en el sector, diría que muchas. Los primeros en cambiar hemos sido nosotros: los profesionales. Ahora estamos mejor preparadas y somos más exigentes. Y este cambio en las personas es lo que está forzando el cambio en las empresas.
Hasta hace poco, no valorábamos lo suficiente conceptos tan imprescindibles como la imagen, la atención al cliente, la seguridad de las mercancías, la limpieza en los procesos o el respeto al medio ambiente. Ahora, las empresas nos preocupamos más por la calidad y la innovación en todas las áreas.
En este tiempo, las compañías se han humanizado y han empezado a relacionarse de otra manera con sus grupos de interés o stakeholder. Ya no trabajan sólo para sus clientes o accionistas, se precisan por el resto de personas que contactan con la compañía y, en el caso de mi empresas, prioridad a los empleados sobre el resto.
A lo largo de estos años, el que también ha cambiado es el cliente que, por encima del precio, espera de una empresa logística un servicio rápido, seguro y fiable, un trato de confianza o un compromiso con unos valores. De hecho, los operadores ya no prestamos servicios sino que nos hemos convertido en verdaderos aliados logísticos de nuestros clientes. No existe otra vía que la colaboración y la empatía entre los distintos agentes para que la cadena de suministros sea exitosa.
Y, por supuesto, el mercado logístico es distinto como consecuencia de la tendencia hacia el stock cero, lo que provoca lotes de compra cada vez más pequeños y una mayor necesidad de urgencia. Cambios que, precisamente, están detrás del auge de la paletería exprés en nuestro país y, en concreto del nacimiento de Palibex.
Estamos modernizando el sector pero debemos hacerlo aún más si queremos retener y atraer el talento de los mejores profesionales.
Dicho esto, no seré yo quien niega el devenir histórico que ha vivido la logística, pero sí defiendo que el avance en los próximos años debe ser aún mayor. Tenemos que acabar con esa invisibilidad que, históricamente, ha condenado a nuestro sector a la grosura y al ostracismo y demostrar que puede ser tan atractiva o más que otros ámbitos profesionales. Ese fue el verdadero motivo por el que me hice empresario del sector que mejor conozco y al que he dedicado toda mi vida profesional, primero en grandes multinacionales extranjeras y ahora con un proyecto empresarial propio en el que cada día participan más personas.
Gracias al auge de e-commerce y a la necesidad de llegar más rápido, es el momento de conseguirlo porque el sector está ganando protagonismo y todo apunta hacia sus buenas perspectivas de empleo. Ahora bien. pese a su buena salud, sigue siendo invisible a ojos de la mayoría y no logra atraer el talento, en especial de la gente joven.
Hagamos la prueba. Si a un universitario recién titulado le preguntan dónde le gustaría trabajar es probable que responda, por ejemplo, que en una empresa tecnológica. Hace unos años hubiera dicho que en la banca y tiempos atrasa en la administración. Pero, ni antes ni ahora, soñaría con trabajar en una empresa de transporte. Y eso que nada de lo que tiene llegaría a sus manos si la logística no existiese.
Por todo ello, es imprescindible que los empresarios pongamos la vista en nuestros empleados y construyamos entornos de trabajo capaces de atraer al talento de los mejores profesionales. No es fácil romper con los prejuicios del pasado pero, hoy más que nunca, toca dar un paso al frente para visibilizar la logística y reivindicar que, además de atractiva, es la clave para que la economía funcione.